En estos días de encierros, cierres y distanciamiento social, van quedando cada vez menos opciones de entretenimiento en Viena. Por suerte, todavía nos queda el salir a pasear y el senderismo por parajes naturales que en esta ciudad abundan. Hoy recorreremos la ruta de Hermannskogel y subiremos a la cima de la colina del mismo nombre, el punto más alto de la capital austriaca.
El itinerario comienza en el barrio de Sievering, en el distrito 19. Para llegar al punto de salida (y también llegada) en transporte público, hay que tomar el autobús 39A y bajarse en la última parada. Son unos 10 kilómetros de caminata, por una vía relativamente sencilla, que se pueden cubrir perfectamente en menos de 4 horas.
A mitad del camino se llega a la cúspide de la colina de Hermannskogel, justo en el borde con Baja Austria, a 542 metros sobre el nivel del mar. Aquí hay una torreta, llamada Habsburgerwarte, y construida en 1888, a la que se puede subir y admirar desde la terraza las vistas de Viena y alrededores. También hay algunas mesas y bancos donde hacer un alto y cargar energías.
Para los que, como nosotros, también estén coleccionando los sellitos de las rutas, el de esta se puede encontrar cerca de la entrada de la Gasthaus zum Agnesbrünnl, en la zona recreativa de Jägerwiese, ideal para las familias con niños, con columpios y cantidad de espacio para corretear, jugar al fútbol o a lo que sea, y también sentarse a descansar.
Estas próximas vacaciones de Navidad, si el tiempo lo permite, planearemos alguna otra ruta. Si alguien se anima, decidme y organizamos algo. No sé exactamente cuántas personas de diferentes domicilios pueden juntarse para una actividad al aire libre, pero supongo que para caminar no habrá tantas restricciones. Lo podemos ir viendo.
¡Un
saludo y feliz puente de la Constitución/Inmaculada/San Nicolás para los que lo tengáis!
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